Harta del "empoderamiento" y la "sorodidad"

No puedo más. De verdad, de verdad, que estoy hasta el moño de este discurso victimista que pregona a los cuatro vientos que las mujeres somos iguales que los hombres y, acto seguido, sin descomponerse lo más mínimo, insiste en que:

  1. hay que proponer a las niñas y adolescentes "modelos" para que se interesen por las matemáticas, la ingeniería o las disciplinas ligadas a la tecnología
  2. hay que "visibilizar" el trabajo de las mujeres, por el mero hecho de haber sido hecho por mujeres
  3. hay que reservar puestos de trabajo / premios /becas / puestos directivos para mujeres
  4. hay que presumir la inocencia de las mujeres en determinadas categorías de delitos incluso aunque ello conlleve asumir la culpabilidad SIN pruebas del acusado, si este es hombre.

Vamos a ver, si de verdad creemos que somos iguales ¿Qué justificación puede darse a estas medidas? ¿Qué diferencia hay entre esto y una "reserva de especie protegida"?

En serio, alguien medianamente orgulloso de sus méritos profesionales, intelectuales, artísticos, o de cualquier otra índole, se querría presentar a un premio Nobel - o su equivalente en su campo- que fuera sólo para "personas de menos de 1,50 m de estatura"? ¿ o "de pelo castaño" y "ojos negros"?...

Y sin embargo se aplauden iniciativas de empresas, fundaciones, entidades públicas y ONGs dirigidas única y exclusivamente a mujeres. ¿De verdad queréis estar ahí? ¿lo que denunciaríais si fuera sólo para hombres tenemos que aplaudirlo porque es sólo para mujeres?

A ver, que comprendo la tentación de subirse a ese carro y conseguir difusión y notoriedad por lo que no es ni más ni menos que tu trabajo y tu obligación (sea en el sector público o en sector privado), pero, jolin, no tratéis encima de darnos lecciones de moral a quienes señalamos la falta de coherencia de la postura.

No llaméis lucha por la igualdad a lo que se parece demasiado a "vamos a cambiar los privilegios para que ahora me favorezcan a mí, porque soy mujer".

Si no hay mérito propio en haber nacido hombre -que NO lo hay-, TAMPOCO lo hay en haber nacido mujer. Defendamos una sociedad de personas libres e iguales en #derechos y no una colección de "identídades" enfrentadas, en la que sólo importa justamente aquello sobre lo que no tenemos ni control ni mérito: el sexo o el color con el que hemos nacido.






Comentarios

  1. Es posible que ya esté resuelto todo este asunto: a partir de ahora cada uno puede elegir ser hombre o mujer sin dar explicaciones.

    Vamos a ver lo que da de sí.

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Gracias por dedicar tiempo a leer y comentar mi blog.
LEC

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